lunes, 5 de noviembre de 2007

Un poco de Historia, sacada de Internet:

Universidades Laborales
Las Universidades Laborales españolas en su Historia


• Hasta 1996, en que se defiende la tesis doctoral "Universidades Laborales: un proyecto educativo falangista para el mundo obrero (1955-1978). Aproximación histórica", Servicio de Publicaciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, (1998) estas instituciones docentes, creadas en la primera parte del franquismo, presentaban un importante vacío bibliográfico. Lo cual denota la escasez de estudios, tanto de ámbito nacional como sectorial, junto con el generalizado desconocimiento de las mismas, con frecuencia pocas veces analizado y, en el mejor de los casos, desde la parcialidad política con el resultado de injusta detracción o alabanza inmerecidas.

El primer intento recopilador corresponde a Flor M0 de Torrijos (hermana del militar panameño Omar Torrijos, Teniente Coronel de la Guardia Nacional y político, que derrocó en 1968 al presidente Arias de Panamá y quien, tras conseguir extraordinarios poderes de la asamblea constituyente panameña encabezó, durante diez años, un régimen militar).
Flor Mª de Torrijos defiende en 1976, en la Facultad de Filosofía, Letras y Educación de la Universidad Complutense de Madrid la primera tesis doctoral sobre las Universidades Laborales: "Las Universidades Laborales en España (su aporte al desarrollo económico-social)". Del extracto de su publicación se puede decir que carece de alcance globalizador y, sin duda, al coincidir la finalización de su contenido con la muerte del dictador en 1975, no hace referencia alguna al proyecto ideológico tantas veces reiterado por el falangista -y ministro de Trabajo con el general Franco- José Antonio Girón de Velasco.
El director de la tesis doctoral de la ciudadana panameña, Prof. Dr. Todolí Duque, catedrático emérito de Ética en la Universidad Complutense de Madrid y ex-rector de la Universidad Laboral de Córdoba, advirtió al autor de estas páginas en entrevista personal en su domicilio de la calle Alcalá de Madrid (19 febrero1990), que estaba por elaborar un serio, riguroso y completo estudio de dichas instituciones. No obstante -el trabajo de Flor Mª de Torrijos- que, si bien únicamente estudia la mitad del tiempo de existencia de las UU.LL. -con trece del total de los veintiún Centros, es decir, el período comprendido entre 1955 y 1968, supone una acertada aportación, de rabiosa actualidad para aquel momento, en el conocimiento de las Universidades Laborales.

Con todo, debe agradecerse el trabajo de la doctora Torrijos porque, a pesar de las evidentes limitaciones políticas que el régimen franquista imponía, su labor significaba una punta de lanza y un reto para futuros investigadores.
En este estado de la cuestión, que venimos reseñando, incluimos también, como otros trabajos menores, el ensayo valorativo y crítico "Informe sobre las Universidades Laborales", en Cuadernos para el Diálogo, n1 16 (octubre, 1969), número extraordinario dedicado a "Aspectos de la Educación en España". Las fundamentadas críticas del citado informe -negativas y positivas- en una España limitada en la libertad de expresión y en un momento de triunfalismo en el sistema de UU.LL. fueron de gran trascendencia. Algunas, referidas al aparato institucional, causaron fuerte impacto en la estructura dirigente del Ministerio de Trabajo y del mutualismo laboral al manifestar la falta de control directo de los verdaderos representantes de la clase obrera sobre las Mutualidades Laborales, instituciones éstas sobre las que recaía, mayoritariamente, la carga financiera de las Universidades Laborales.
Otras, darían lugar al intento, inconseguido, de aglutinar en un falso corporativismo al personal y alumnado de los Centros desviando la referencia a personas concretas, militares y mandos de falange y mutualismo, en flagrantes casos en los que no existía más cualificación que la "permanente adhesión inquebrantable" al régimen del dictador: "En los distintos estamentos se arrastra un lastre de personas introducidas en los primeros años de creación de las Universidades Laborales que por su mentalidad dificultan un funcionamiento más ágil y evolutivo". Como no podía ser menos, la revista UNI, órgano oficial (y ministerial) de la Hermandad de Antiguos Alumnos de UU.LL. -tutelada y financiada por el Ministerio de Trabajo- ante tales críticas, cerró filas en defensa de laas instituciones franquistas (núm. 7, octubre-diciembre 1969).

Sin embargo, en oposición, no se dejaba de reconocer la valoración de aspectos auténticamente educativos al resaltar con elogio que las Universidades Laborales son una de las instituciones docentes más positivas con que cuenta el país, pues estando a idéntico nivel cultural que institutos de bachillerato y colegios privados y religiosos, se encuentran a nivel bastante superior en lo que respecta a educación social, económica, política, deportiva y artística.
Por las mismas fechas la revista Interview, marzo 1979, se hace eco de la indefinida situación en que se encuentran estos Centros con la publicación del artículo "Los obreros que Franco quiso aburguesar", en el que se hace un sucinto relato de evidente parcialidad al considerar y valorar el sistema únicamente desde aspectos negativos.
Ya en la España democrática, con un régimen político que permite y garantiza la libertad de expresión, José M0 Goizueta, Secretario General del Centro de Orientación de Universidades de Cheste (Valencia) entre 1969 y 1974, contribuye al conocimiento panorámico de estos Centros con la publicación de un excelente artículo: "Algunas reflexiones sobre las Universidades Laborales", en Documentación: sistema educativo de UU.LL., (diciembre, 1977), Instituto de Técnicas Educativas, Alcalá de Henares, en el que analiza la situación institucional, financiera y docente de estos centros docentes, estableciendo un diseño de futuro para los mismos a la vista de la ineludible necesidad de replantearlos dentro de un nuevo orden democrático.
En 1978, el Delegado General de Universidades Laborales, Demetrio Casado, también salta a la palestra aportando un atrevido artículo "Las Universidades Laborales ante el futuro", en la revista antes citada: (marzo, 1978), Alcalá de Henares, en el que trata de desmitificar el carácter mitológico de estos Centros y, al propio tiempo, derribar el hecho de la "indoctrinación de la clase obrera según un ideario monocolor". Aspecto éste que aunque califica de presunto, no es menos cierta su asunción por gran parte de la sociedad española como consecuencia de las reiteradas manifestaciones de los distintos ministros falangistas que durante toda la historia del régimen franquista ocuparon la cartera de Trabajo.

Un año después, recién extinguidas las Universidades Laborales, Demetrio Casado, vuelve a verter su opinión en otro artículo "Las enseñanzas integradas y el cambio SUL-INEI" (marzo, 1979) respecto del cambio institucional que comporta la creación del Instituto Nacional de Enseñanzas Integradas. Es preciso señalar que la creación de este organismo, en sustitución de las UU.LL., fue más una necesidad de regulación administrativa y financiera -como consecuencia de la reforma de la gestión institucional de la Seguridad Social- que docente.
En 1985, el catedrático de Historia de la Educación de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), Prof. Dr. Federico Gómez y Rodríguez de Castro -a quien debemos considerarlo como autoridad en la materia pues, a su condición de profesor universitario se une la de haber desempeñado durante varios años el importante cargo de Delegado General de Universidades Laborales- publica el artículo "Las Universidades Laborales", en La Educación en la España Contemporánea. Cuestiones históricas, Sociedad Española de Pedagogía, Madrid, 1985, obra conjunta dirigida por el también profesor universitario Porf. Dr. José Ruiz Berrio, realizando en un verdadero alarde de síntesis la evolución histórica de estos Centros.
Como ya ha quedado dicho al comienzo de estas líneas, es en 1996, cuando el catedrático Ricardo Zafrilla Tobarra defiende su tesis doctoral "Universidades Laborales: un proyecto educativo falangista para el mundo obrero (1955-1978). Aproximación histórica", editada por la universidad castellano-manchega dos años después. Trabajo éste, que va a significar el primer momento y punto de partida para la investigación histórica y bibliográfica de las Universidades Laborales en todo su conjunto a lo largo del cuarto de siglo de la existencia de estos centros docentes.

Dicho trabajo, del que se hace más amplia reseña en otro de las páginas de esta modesta webb, se estructura en cuatro capítulos en los que se analiza la trayectoria de estos Centros, desde su fundación en 1955, con sus antecedentes nacionales y extranjeros, hasta su extinción en 1978, realizándose un recorrido por su desarrollo institucional y describiéndose, además, aquellos rasgos que constituyeron la esencia y singularidad de estos Centros, esto es, el estudio y análisis de sus estructuras organizativas, docentes, financieras, jurídicas (con sus irregularidades legales), régimen becario, etc., sin olvidar las necesarias referencias al contexto histórico en que nacieron y evolucionaron las Universidades Laborales, instituciones éstas, que han dejado, además de una indeleble huella arquitectónica en la geografía española, un rastro cultural y profesional en el casi medio millón de alumnos que pasaron por sus aulas.
Al año siguiente (1997), y en conmemoración de la festividad catalana de Sant Jordi, el I.E.S. “Pere Martell” de Tarragona publica un trabajo monográfico: Joseph Mª Buqeras i Bach, LA LABORAL, C.E.T., Tarragona, 1997, en el que el Doctor Zafrilla Tobarra realiza un estudio específico de la Universidad Laboral de Tarragona

Tres años después, aparece la publicación de Ruiz Berrio, J. y otros: La Educación en España a examen (1898-1998), Ministerio de Educación y Cultura e Institución Fernando el Católico (C.S.I.C.), Zaragoza, 1999, en la que se incluye la comunicación: del Dr. Ricardo Zafrilla Tobarra: “Universidades Laborales: un modelo de educación falangista en el franquismo”, tomo II, págs. 177 y ss., quien con la brevedad como nota característica de este tipo de publicaciones realiza un aporte a la Historia de la Educación española en el centenario 1898-1998.
Una interesante monografía es la del profesor de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Castilla-La Mancha, Dr. Felipe Centelles Bolós: Los cien mil hijos de Girón. El impacto social de las Universidades Laborales, Editorial Azacanes, Toledo (2002), en la que la visión es más intrínsecamente sociológica que histórica y es una de las facetas de estos centros en las que, sin duda alguna, habrá que motivar a los investigadores y estudiosos para situar en sus justos términos a estos centros educativos del franquismo.
Otro trabajo monográfico es el de Andrés Mut: Yo estuve en Cheste, Diálogo, Valencia, 2003, quien hace un sucinto examen del Centro de Orientación de Universidades Laborales de Cheste (Universidad Laboral de Cheste) en el que lógicamente vuelca los consiguientes relatos nostálgicos y que en algunos aspectos muy puntuales no podamos compartirlos, pues en ese detalle estamos situados a ambos lados del puente.

En 2003, en el Departamento de Teoría e Historia de la Educación y Pedagogía Social de la Universidad de Sevilla, es defendida por la profesora de la Facultad de Educación de la universidad mencionada -Patricia Delgado Granados- la que va ser tercera tesis doctoral sobre esta temática con el sugestivo título: Análisis Histórico de la Universidad Laboral de Sevilla. Una institución falangista para el mundo obrero (1955-1970).De dicha tesis es deudor el trabajo de la misma autora La Universidad de los pobres. Historia de la Universidad Laboral Sevillana y su legado a la ciudad, Secretariado de Publicaciones de la Universidad de Sevilla, 2006. Esta obra de la doctora Patricia Delgado comprende desde la década de los cincuenta -concretamente al año 1956, fecha en la que abre por primera vez sus puertas la institución sevillana- hasta que se aprueba la nueva Ley General de Educación de 1970, la cual va producir un cambio en la concepción y estructuración de este tipo de instituciones. El trabajo se estructura en seis capítulos en los que se recogen esos primeros años en el que el centro educativo inició su andadura en la Sevilla franquista y se analizan diversos aspectos tales como el nuevo edificio, su profesorado y alumnado, la vida cotidiana en la institución, etc., y lo que significó su configuración y evolución en la ciudad andaluza.
Una nueva tesis doctoral sobre las Universidades Laborales ve la luz en febrero de 2005: La Universidad Laboral de Zamora: una manifestación del proyecto social y educativo del franquismo (1946-1980) del profesor de la Universidad de Salamanca, Galo Sánchez Sánchez, quien la defiende en el Departamento de Teoría e Historia de la Educación dicha universidad El tribunal, presidido por el catedrático de Historia de la Educación y actual Secretario de Estado, Prof. Dr. Alejandro Tiana Ferrer, otorgó a dicha tesis doctoral la calificación máxima de CUM LAUDE.



En 2006 el Instituto de Estudios Zamoranos de la Diputación de Zamora protagoniza la edición de la misma con igual título y en el que a lo largo de 365 páginas, se estructuran los siguientes capítulos: España en la década de los años 50 (siglo XX); origen, creación y funcionamiento de las UU.LL; la Universidad Laboral de Zamora; la Universidad Laboral de Zamora como manifestación del proyecto social y educativo del franquismo; la formación humana y las señas de identidad de la Universidad Laboral en la ciudad y la provincia de Zamora. Conclusiones, fuentes y bibliografía. Anexos.
El trabajo se estructura en capítulos: España en la década de los años 50 (siglo XX); origen, creación y funcionamiento de las UU.LL; la Universidad Laboral de Zamora; la Universidad Laboral de Zamora como manifestación del proyecto social y educativo del franquismo; la formación humana y las señas de identidad de la Universidad Laboral en la ciudad y la provincia de Zamora. Conclusiones, fuentes y bibliografía. Anexos.
El estudio se contextualiza inicialmente en la época de la posguerra estudiando las posibles instituciones de influencia que dieron origen al Sistema de UU.LL. Se aborda el tiempo previo de su creación así como la narración de los avatares y sucesos que dieron lugar a la puesta en marcha de los primeros centros. Se centra en las condiciones sociales y políticas que propiciaron la creación de la Fundación San José y posteriormente su incorporación como centro de formación profesional a la estructura de las UU.LL.
Se analizan los acontecimientos más importantes de su transcurso, sus rasgos administrativos, educativos y su proyecto de formación integral de los alumnos. Curso a curso se ofrecen datos numéricos de alumnado y especialidades. Se afronta finalmente la influencia de este centro en la vida ciudadana de Zamora y sus interrelaciones con la población y el desarrollo local y provincial. Se abordan numerosas conclusiones que tratan de enmarcar con objetividad lo que ha sido la realidad de este centro hasta la salida de la congregación salesiana en 1980.
En noviembre de 2005, la catedrática del área de Composición Arquitectónica de la Universidad Politécnica de Valencia, Profª. Dra. Carmen Jordá, publica un excelente trabajo monográfico (Universidad Laboral de Cheste, 1967-1969, Fernando Moreno Barberá), Colección Archivos de Arquitectura, España siglo XX, en el que, además de rendir homenaje al maestro de la arquitectura y prolífico arquitecto Moreno Barberá, es sin duda alguna, el mejor estudio que sobre dicha Universidad Laboral existe hasta hoy. Estamos convencidos que la labor de la profesora Jordá habrá de servir de ejemplo para análogas investigaciones arquitectónicas de otras Universidades Laborales.
En octubre de 2006, el historiador Zafrilla Tobarra junto con la economista Julia Utiel Heras publican la obra Universidades Laborales: aproximación a su Historia Económica, en la que a lo largo de 190 páginas realizan el estudio presupuestario y financiero de las mismas durante el cuarto de siglo de su existencia (1955-1980). La obra comienza con el estado actual de la cuestión y una sinopsis histórica que trata de recordar al lector los anales de estas genuinas instituciones docentes del franquismo, injusta e indebidamente conocidas como la escuela pública más cara de España por las generosas prestaciones que gozaron los Abecarios laborales@. Esta consideración, obviamente peyorativa, es derribada de forma objetiva y científica a lo largo de las tres partes de que consta la descripción y valoración económica. El libro, con un precio de doce euros, es vendido y distribuido por Librería Popular, calle Octavio Cuartero, 17 -02003 Albacete. Teléf. 967 225863, e-mail popular@popularlibros.com sirviéndose a toda España a reembolso. Si se desea adquirirlo firmado y dedicado debe advertirse de ello al solicitarlo a la librería para que ésta lo indique a los autores.

En noviembre de 2006, coincidiendo con el primer cincuentenario de la puesta en funcionamiento de las Universidades Laborales (noviembre 1956-2006), el Colegio de Arquitectos de Catalunya edita la obra "LA UNIVERSIDAD LABORAL DE TARRAGONA 1952-1956" dirigida por el catedrático de la Universidad de Catalunya y arquitecto, Prof. Dr. Xavier Monteys, con la colaboración, entre otros, de los también arquitectos Jordi Guerrero y Nacho Álvarez. La edición, redactada en cuatro idiomas, de gran y lujoso formato, y con un documentación gráfica inédita, estudia exhaustivamente la arquitectura de este complejo docente que, si bien se proyecta y construye en un entorno cultural mediocre dentro de la cobertura política fascista, no es menos cierto que determina junto con la Ciudad Residencial del sindicalismo franquista la primera implantación de la arquitectura moderna en Tarragona. Y ello es así, por cuanto significa el mayor conjunto educativo construido de una sola vez en "L'arquitectura del anys cinquanta a Catalunya" y que, desgraciadamente, se encuentra hoy casi desaparecida o destruida. Y, ello es así, porque en algunos casos, esta arquitectura, con sus edificios, nos recuerda un pasado incómodo. El libro pretende resaltar en sus justos términos, más allá del valor o uso inmobiliario y, por supuesto, de toda nostalgia, a la Universidad Laboral de Tarragona como una parte de nuestra historia cultural de la llamada arquitectura moderna del siglo XX.
En abril de 2007, el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Tarragona, a través de la Editorial Silva y con un precio de catorce euros, edita la interesante publicación LA LABORAL DE TARRAGONA en la que se rescatan para la historia ilustraciones fotográficas que merecen ser consideradas dignas de alabanza tanto por su selección como por su calidad. Constituyen por sí mismas un soporte gráfico de la historia de la construcción de esta universidad laboral a la vez que muestran la geografía de los terrenos en la década de los sesenta. Dicho trabajo comprende dos partes bien diferenciadas. Por un lado, se hace referencia a los antecedentes y construcción del proyecto (en lengua catalana) y cuyo autor es Arquitecto Técnico y profesor de secundaria Josep María Buqeras i Bach. Por otro, el Dr. Ricardo Zafrilla Tobarra (en castellano) realiza una breve historia en la que hace una sucinta narración de la génesis de las Universidades Laborales.
Existen otros trabajos monográficos que no citamos por cuanto al no haber tenido edición comercial, ya que fueron los propios Centros los que emprendieron las tareas editoras sin más ánimo de lucro que el de memorizar para la historia legítimas nostalgias y vivencias cotidianas, desconocemos cuál fue el resultado de estas publicaciones caseras a nivel del Estado. Valgan los ejemplos de las Universidades Laborales de Cheste y Toledo. En todo caso constituyen por sí mismos, a más de una manera de incrementar los conocimientos, una fuente de datos en modo alguno despreciables.
Para terminar este estado actual de la cuestión, también el Dr. Ricardo Zafrilla Tobarra es el responsable de otros trabajos de investigación sobre las Universidades Laborales que se encuentran en avanzado estado de elaboración y de los que, por ahora, únicamente se citan los títulos correspondientes. Así, próximas publicaciones son: Datos y cifras para la Historia de las Universidades Laborales; Notas juridicolegislativas sobre el profesorado de Universidades Laborales; Las Universidades Laborales en imágenes; Historia, mito y realidad de las Universidades Laborales; Fuentes y bibliografía básicas para la Historia de las Universidades Laborales.

Y esta sacada de nuestros compañeros :http://www.palimpalem.com/2/maestrosindustriales/index.html?body1.html
LA FORMACIÓN PROFESIONAL EN TIEMPOS DE FRANCO



La guerra civil dejó a España arruinada. En el capítulo material, 300.000 viviendas y 200 pueblos quedaron total o parcialmente destruidos así como 20.000 iglesias; casi el 40% de las carreteras y los puentes eran inviables; entre el 40 y el 70% del parque móvil ferroviario inutilizado; mas del 23% de la superficie agrícola no se labraba y. el 31% de la industria quedó fuera de juego. Si a esto se une la expoliación casi total de las reservas de oro y divisas y la enorme deuda contraída, el panorama era desolador.



Pero con ser grande la bancarrota material, mayor era el desastroso estado de la población. Según datos del Servicio Histórico Militar en los tres años bélicos se habían producido en números redondos 300.000 muertos en campaña, 155.000 fallecidos por causas naturales y unos 190.000 exiliados no recuperables. Quedaban 24 millones de habitantes en su mayoría reducidos a la condición de proletarios agrícolas e industriales con un 70% sin trabajo, un 23,7% de analfabetos y solo un 18,2% con nivel de vida asimilable al de las clases medias.



En tales circunstancias, el gobierno franquista volcó los esfuerzos del Estado hacia una vertiginosa reconstrucción nacional y a buscar fórmulas que paliaran la gravísima desigualdad social heredada. Para esto último planteó una política en dos direcciones: Por un lado se lanzó a crear un sistema de seguridad social, antes ni siquiera soñado, que acabaría cubriendo las situaciones de vejez, viudedad, orfandad, desempleo, jornada laboral reducida, vacaciones pagadas y una red de asistencia sanitaria con atenciones médicas y hospitalarias modélicas que aún subsisten. De otra parte se empeñó en elevar la cultura de las masas proletarias como único medio de arrancarlas de su ancestral subdesarrollo. Y esta última actividad, motivo del presente trabajo, la desarrolló por procedimientos siempre apoyados en el entusiasmo creativo de hombres de valor contrastado y capacidad arrolladora de ejecución..



PLANTEAMIENTO INICIAL.



Franco consideró tarea prioritaria erradicar el analfabetismo y para ello no solo impulsó la escolaridad sino que embarcó en la aventura a las Fuerzas Armadas. Conocedor del sentido de disciplina y eficacia de sus componentes, ordenó que en todas la Unidades se organizaran escuelas aprovechando los maestros y universitarios incorporados en los reemplazos. Y estableció la norma de que ningún soldado pudiera disfrutar permisos ni licenciarse sin antes haber aprendido a leer, escribir y las cuatro reglas básicas aritméticas. El resultado fue espectacular: el 23,2% de analfabetos existentes en 1940 fue descendiendo al 17,3% en 1950, al 12,7% en 1960, al 8,9% en 1970 y al 5,8% en 1975, año en el que todos los analfabetos superaban los 45 años de edad.



Pero la lucha contra el analfabetismo, en su pensamiento, era condición necesaria, no suficiente. Se precisaba elevar el nivel cultural de las masas obreras de forma sustancial para independizarlas de los tradicionales caciques y especuladores. Y este cometido se lo asignó al Ministerio de Trabajo en cuya cabeza colocó, en 1941, a un hombre que se revelaría como una auténtica fuerza de la naturaleza capaz de superar todos los obstáculos: el falangista José Antonio Girón de Velasco.



LA ESCUELA DE CAPACITACIÓN SOCIAL COMO GERMEN DE DESARROLLO



En 1942 se crea, dependiendo del Ministerio de Trabajo, la Escuela de Capacitación Social de Trabajadores dirigida por el doctor canario Francisco Aguilar Paz. Organiza cursos para trabajadores jóvenes y adultos con inquietudes sociales contrastadas y de sus aulas fueron saliendo promociones de gentes que incluso habían combatido en distinto bando pero que compartían la convicción de que los conflictos entre clases podrían resolverse por vías de negociación, siempre y cuando se elevara notablemente el nivel cultural de los productores. Esta Escuela habría de ser el germen del proceso educativo y el laboratorio principal de ideas. Sus locales actualmente están ocupados por la Fundación Julián Besteiro de la UGT.



Girón nombró en 1945 Subsecretario de su Departamento a Carlos Pinilla Turiño, zamorano, Abogado del Estado de privilegiada inteligencia y falangista entusiasta que había probado su valor y patriotismo en la División Azul. Paralelamente, aprovechó a los antiguos alumnos de Escuela de Capacitación más distinguidos para formar equipos de asesoramiento. Los esfuerzos concurrentes del Subsecretario y los asesores darían origen al sistema de formación profesional.



En 1948, el Ministro y su Subsecretario plantearon la posibilidad de montar un quimérico régimen de formación profesional que culminara en Universidades Laborales y para trabajar en la idea convocaron a los falangistas Cristóbal Espín y Gabriel Ledesma, al ex diputado socialista Abrés Ovejero a un anarquista apellidado Blanco y a un antiguo miliciano sindicalista vasco de apellido Oca. El quinteto de idealistas, en reuniones dominicales, fue plasmando la idea en proyecto y calculando hasta el menor detalle, desde la uniformidad a utilizar, los programas a cubrir, el régimen de vida y los gastos a soportar.



El resultado de los trabajos permitió a Girón declarar en Sevilla, el 25 de noviembre de 1950: “Vamos a crear gigantescas Universidades donde se formen, además de obreros técnicamente mejores, hombres de arriba abajo, capacitados para todas las contiendas de la inteligencia, entrenados para las batallas del espíritu, de la política, del arte, del mando y del poder. Vamos a hacer hombres distintos, vamos a formar trabajadores dentro de unos españoles libres y capaces. Vamos a hacer la revolución de los hombres y no la revolución de unas máquinas de rendir trabajo”.



BECAS DE ESTUDIO PARA HIJOS DE TRABAJADORES



Para dar enseñanza a las masas obreras juveniles no bastaba con asignar a cada alumno una cantidad económica que cubriera sus gastos de estudio. Todo muchacho de extracción obrera o agrícola era entonces una potencial fuente de ingresos para su familia pues a los 14 años (casi siempre mucho antes) aquella le ponía a trabajar siendo sus jornales indispensables para la supervivencia del conjunto familiar. En estas circunstancias poco hubiera resuelto un régimen clásico de becas que obligara a los padres a mandarle dinero de cuando en cuando para gastos extraescolares y viajes. Por lo cual se concibió una macro-beca que comprendiera: La totalidad de los costes de enseñanza; los viajes autorizados a y desde el centro de enseñanza; calefacción y alumbrado; lavado y entretenimiento de ropa; servicios médicos y farmacéuticos; y todo lo necesario para el aseo.

Se consideró muy importante el vestuario, que podría contribuir a marcar diferencias entre pobres y ricos y, para evitarlo, con la beca se entregaba el siguiente equipo por alumno y curso:



Traje de diario (chaqueta, cazadora o jersey y dos pantalones)

Prenda de abrigo y dos pijamas.

Calzado (botas y zapatos de vestir)

Dos monos de trabajo, albornoz y equipo de gimnasia



SOSTÉN ECONÓMICO DE LAS UNIVERSIDADES LABORALES



La creación y el sostenimiento de la ambiciosa red de Universidades Laborales y la plena atención al alumnado procedente de las clases sociales más modestas exigían recursos materiales de enorme magnitud. De proporcionarlos se encargó, inicialmente, el Estado y después las Mutualidades Laborales que en el periodo Girón (1941-57) adquirieron un desarrollo extraordinario y una pujanza arrolladora.



El mutualismo se apoyaba en la afiliación obligatoria de cada trabajador a la Mutualidad de su rama productiva y en la gestión encomendada a las bases. Los órganos de gobierno se nutrían con los propios productores que inyectaban a su actividad dosis muy grandes de honestidad, sana ambición y vitalidad.



DEL BACHILLERATO PROFESIONAL A LAS UNIVERSIDADES LABORALES



En 1949, por Ley de 16 de julio, se estableció un Bachillerato especial de carácter profesional, en régimen de internado, que se impartió en Institutos Laborales levantados en las zonas de previsible desarrollo industrial.



Ante los espectaculares éxitos de la enseñanza profesional, en 1956, por una Orden conjunta de los Ministerios de Trabajo y de Educación, se aprobó el Estatuto Provisional de las Universidades Laborales constituyéndose como tales la de Gijón (“José Antonio Girón de Velasco” con gestión encomendada a los jesuitas), la de Córdoba (“Onésimo Redondo” encomendada a los dominicos), las de Sevilla y Zamora ( respectivamente “José Antonio Primo de Rivera” y “San José” encomendadas a los salesianos) y la de Tarragona (“Francisco Franco” encomendada a laicos procedentes en su mayoría de la Delegación Nacional de Juventudes).



El 11 de mayo de 1959 se aprobó la Ley de Universidades Laborales desarrollada por un Reglamento de 24 de noviembre de 1960. El régimen de estudios comprendía un ciclo común, en el que se concedía especial importancia a la educación humana, física y religiosa con actividades complementarias tan variadas como escribir a máquina, conducir un coche, tocar instrumentos musicales, aeromodelismo, literatura práctica y deportes. Un segundo ciclo, de especialización, se articulaba en fases de aprendizaje, oficialía y maestría en las ramas de Agricultura, Metalurgia, Mecánica, Electricidad, Construcción, Artes Gráficas, Industria Textil e Industrias Alimentarias. Cada una de las Universidades desarrollaba una o varias de estas ramas concretas.



Todas las Universidades, construidas de nueva planta, combinaban en su arquitectura la suntuosidad casi colosal, para dar prestancia al Centro, y la funcionalidad para el mejor desarrollo de la enseñanza. Dormitorios, aulas, talleres, salón de actos, Iglesia y campos de deportes, fueron diseñados por los arquitectos más prestigiosos de la época.



La estructura docente concedía gran capacidad de participación al alumnado dentro de un estricto ambiente disciplinado. Normalmente se formaban Divisiones de cien alumnos al frente de las cuales se destinaban dos educadores. Los mandos intermedios (jefes de Sección, Clase y Dormitorio, Delegados de Orden, Gestión y Deportes) eran desempeñados por alumnos elegidos por sus compañeros en votación democrática secreta.



LAS NUEVAS UNIVERSIDADES LABORALES DE LOS AÑOS SESENTA



En 1957 José Antonio Girón cesó en el Ministerio de Trabajo por presión de las fuerzas financieras que recelaban de su espíritu revolucionario y se quejaban del enorme gasto dedicado a obras sociales. Su sucesor, Fermín Sanz Orrio, se limitó a mantener las Universidades existentes. Luego, los Ministros tecnócratas Laureano López Rodó, Alberto Ullastres y Mariano Navarro Rubio, impulsados por el tandem Jesús Romeo Gorría (Trabajo) y Torcuato Fernández Miranda (Promoción Social) incluyeron en los sucesivos Planes de Desarrollo nuevas Universidades Laborales que siguieron el estilo grandioso de las anteriores. Se situaron en La Coruña, Ayuntamiento de Cullaredo; Alcalá de Henares (Madrid); Zaragoza (“Virgen del Pilar” para alumnado femenino encomendado a la Sección Femenina); Cáceres; Huesca; Eibar (Guipúzcoa) y Cheste (Valencia)



IMPACTO DE LA LEY GENERAL DE EDUCACIÓN EN LAS UNIVERSIDADES LABORALES



La Ley General de Educación y Financiamiento de la Reforma Educativa (agosto de 1970) suprimió el funcionamiento, hasta entonces autónomo de cada U. L., y las integró en el régimen académico general. A partir del 2 de julio de 1972 fueron reconocidas como centros docentes no estatales denominados Centros Universitarios Laborales



Hasta 1975 se crearon Centros de dicho carácter, reduciendo el internado y aumentando el alumnado femenino. A impulsos sobre todo de los Ministros Fernando Suarez y José Solís se levantaron en Gran Canaria, Tenerife, Toledo, Málaga y Almería.



DECADENCIA Y FIN DEL MOVIMIENTO UNIVERSITARIO LABORAL.



En 1978 los Centros de U.L. pasaron a depender exclusivamente del Ministerio de Educación y Ciencia por intermedio de un organismo autónomo llamado Instituto de Enseñanzas Integradas.



En 1980, con la UCD en el Gobierno, se suprimió el Instituto de Enseñanzas Integradas y el patrimonio y recursos de las U.L. pasó a la Administración del Estado a través de la Dirección General de Enseñanzas Medias.



En 1982, los Gobiernos socialistas integraron en la D.G. de la Función Pública a todo el personal que prestaba destino en las U.L, a efectos de nuevos destinos y al año siguiente sus instalaciones fueron entregadas a las Administraciones Autonómicas al tiempo que se transferían las competencias educativas.



En las antiguas Universidades Laborales hoy funcionan Institutos de Enseñanza Secundaria, Complejos Educativos de diferentes clases o, incluso, Universidades Privadas como la “Pablo Olavide” de Sevilla que se ha distinguido recientemente por acoger bajo su fuero a inmigrantes ilegales promoviendo graves tensiones sociales.



De las Universidades Laborales queda el recuerdo de un experimento social que produjo resultados espectaculares. Su desaparición truncó la posibilidad de disponer de mano de obra técnica y culturalmente muy cualificada que cada vez se demanda con mayor intensidad por la sociedad industrial desarrollada. En cambio, la juventud española ha sido orientada demagógicamente hacia la obtención de títulos universitarios clásicos que producen en sus poseedores grados de frustración crecientes al no poder ser aplicados por la enorme inflación de titulados.


Eduardo Fuentes Gómez de Salazar


En mi opinión, en nuestra época y a nuestra edad, 14 añitos no notamos represión en la laboral, creo que a partir de los 70 y poco a poco la libertad de expresión fué creciendo.

Opino que tanto la laboral de Tarragona , como otras eran excelentes centros de formación, por Tarragona pasaron cerca de 60.000 alumnos en cuanto a sevilla:

RESEÑA HISTORICA DE LA UNIVERSIDAD LABORAL DE SEVILLA EN EL 50 ANIVERSARIO DE SU CREACIÓN

Conmemoración celebrada, el día 20 de enero de 2007, por la
Asociación de Amigos de la Universidad Laboral de Sevilla.

Por: Jacinto Contreras Vázquez

Ingeniero Técnico Químico y Especialista-Diplomado en Galvanotecnia y Tratamiento de Superficies, por la Universidad Laboral de Huesca, y Técnico Especialista en Seguridad del Trabajo e Higiene Industrial, por la Consejería de Trabajo e Industria de la Junta de Andalucía. Autor-Editor del libro Guerra de Granada: la toma de Cambil y Alhabar por los Reyes Católicos. Septiembre 1485. Jaén, 2006.



La Universidad Laboral José Antonio Primo de Rivera de Sevilla, está situada a 7 Kms. de Sevilla, en la carretera local SE-401, de Sevilla-Utrera, y ocupa una finca de 288 hectáreas de extensión. Cerca de 100 hectáreas son ocupadas por la zona edificada, con un edificio central del que parten en alas las construcciones dedicadas a residencias, aulas e instalaciones complementarias. Esta dominada por una alta torre de 63 metros de altura, y tiene 7 laboratorios y 12 talleres, 42 aulas ordinarias y 8 extraordinarias. Hoy día, en sus instalaciones, una vez remodeladas, está instalada la Universidad Pablo Olavide de Sevilla.


La primera Universidad Laboral que entró en funcionamiento fue la de Gijón durante el curso académico de 1955-1956. Al iniciarse el curso académico de 1956-1957 entran en funcionamiento tres nuevas Universidades Laborales: Sevilla, Córdoba y Tarragona. La gestión de estos centros de enseñanza se encomendó a las órdenes religiosas siguientes: la Universidad Laboral “José Antonio Girón” de Gijón, a los Jesuitas, la Universidad Laboral “Onésimo Redondo” de Córdoba, a los Dominicos y la Universidad Laboral “José Antonio Primo de Rivera” de Sevilla, a los Salesianos. Excepto la Universidad Laboral “Francisco Franco” de Tarragona que fue dirigida por personal civil afiliado al Movimiento Nacional.

La Universidad Laboral José Antonio Primo de Rivera de Sevilla comenzó su curso docente el día 3 de noviembre de 1956, así rezaba en la leyenda de la placa conmemorativa que se colocó para el recuerdo:


ESTA UNIVERSIDAD LABORAL
JOSÉ ANTONIO PRIMO DE RIVERA
DIO PRINCIPIO A SUS TAREAS DO
CENTES EL DÍA 3 DE NOVIEMBRE DE 1956
SIENDO CAUDILLO DE ESPAÑA
FRANCISCO FRANCO BAHAMONDE




En el acto de inauguración el primer Rector, D. Luis Ortiz Muñoz, explicó el sentido y la finalidad de las Universidades Laborales con las palabras siguientes:

Injertar la sagrada dignidad del trabajo en el magisterio intelectual, que define los valores esenciales de un pueblo, reivindicar para el proletariado su inviolable derecho a la cultura, raíz de toda redención, justicia y libertad; infundir sobre la actividad del hombre, por simple y anónima que sea, el soplo generador del espíritu; erigir definitivamente al trabajo en patrimonio vital de la comunidad, en acueducto de su energía y de su riqueza, he aquí la misión y responsabilidad de una revolución planteada inexorablemente sobre el horizonte social de España [....] Las universidades laborales son instrumento esencial de nuestra más decisiva acción revolucionaria. Forjar al hombre entero y completo, en todas sus dimensiones, es la tarea de las Universidades Laborales.

En el día anterior, es decir, el día 2 de noviembre de 1956, se produjo la llegada de los alumnos procedentes de muchos rincones de España. Sobre este hecho la revista UNI nº 36, Diciembre-1976, dice:

La llegada del primer alumno: A las once de la mañana del 2 de noviembre de 1956, se nos adelantó el primer alumno que llegaba a la Universidad Laboral de Sevilla; no estaba previsto que llegasen expediciones hasta las primeras horas de la tarde de dicho día, pero Fernando Gómez Ortiz, de Béjar (Salamanca), casualmente se anticipó a todos sus compañeros y fue, por tanto, un alumno verdaderamente histórico para nuestro Centro. Con su maleta en ristre, entrando con el pie derecho, sin importarle ni Sevilla ni el Guadalquivir.



NOTA: En la comida de Conmemoración del 50 Aniversario de la Universidad Laboral de Sevilla un grupo de asistentes me comentan que esta foto no puede ser del año 1955, ya que en aquel momento los autobuses eran los amarillos de Sevilla y no éste que aparece en la foto con el escudo de la Universidad Laboral de Sevilla, por tanto sería una foto montaje realizada posteriormente para guardarla como recuerdo. A mí ya me pareció extraño que hubiera un fotógrafo aquella mañana esperando a que llegarán los alumnos, así como la posición del alumno que baja del autobús con mucha seguridad mirando al frente en vez del al suelo ya que lo lógico es que llegara desorientado y algo asustado. Además es extraño que fuera tan bien vestido con un traje de chaqueta muy parecido al que se les dotaba a los alumnos en las Universidades Laborales.

Fueron Rectores de la Universidad Laboral de Sevilla, las personas siguientes:

1. Luis Ortiz Muñoz: 1-Agosto-1956 a 31-Enero-1957.
2. Jose María Piñar y Miura: 01-Febrero-1957 a 31-Enero-1964.
3. José Hernández Andrés: 01-Febrero-1964 a 23-Octubre-1967.
4. Manuel de Lorenzo Pajuelo: 24-Octubre-1967 a 04-Octubre-1972.
5. Santiago Sánchez Regalado: 05-Octubre-1972 a 28-Septiembre-1976.
6. Guillermo González Santos: 29-Septiembre-1976 a 01-Septiembre-1978.
7. Manuel Yoldi Delgado: 01-Septiembre-1978 a 12-Enero-1983.

La evolución de la formación impartida durante su funcionamiento se puede resumir en las tres etapas siguientes:

 Etapa inicial: Iniciación profesional (Orientación y selección) y Aprendizaje Industrial.
 Etapa intermedia: Bachillerato Superior General y Técnico, Maestría Industrial, Capataces Agrícolas y Peritaje Industrial.
 Etapa final: Formación Profesional 1º y 2º Grados, BUP (Bachillerato Unificado Polivalente), COU (Curso de Orientación Universitaria), Ingeniería Técnica Agrícola, Ingeniería Técnica Química y Arquitectura Técnica.

NOTAS:
Formación Profesional de 1º Grado: Agricultura, Mecánica, Electricidad, Construcciones y Obras Públicas, Delineantes y Construcciones Metálicas.
Bachillerato Técnico Superior (en su día BUP, en los sectores Agropecuario e Industrial).
Formación Profesional de 2º Grado: Agricultura, Mecánica, Electricidad, Electrónica, Construcciones y Obras Públicas, Delineantes y Construcciones Metálicas.
Arquitectura Técnica: especialidad de Ejecución de Obras.
Ingeniería Técnica Agrícola: especialidad de Explotaciones Agropecuarias e Industrias Agrícolas.
Ingeniería Técnica Química Industrial.

Durante los primeros 20 años de funcionamiento, bajo la dirección de la Congregación Salesiana, auxiliada por una plantilla de Profesores entregados y por otra esforzada plantilla de Personal de Servicios Auxiliares, se formaron en esta institución los alumnos siguientes:

UNIVERSIDAD LABORAL DE SEVILLA
CURSO ALUMNOS
--------- Internos Media Pensión Externos Total
1956-57 429 ----- 265 694
1957-58 646 388 ---- 1.034
1958-59 827 359 ---- 1.186
1959-60 955 162 ---- 1.117
1960-61 931 195 ---- 1.126
1961-62 1.219 212 ---- 1.503
1962-63 1.181 145 55 1.331
1963-64 1.412 203 61 1.676
1964-65 1.504 198 32 1.734
1965-66 1.447 184 34 1.665
1966-67 1.397 197 28 1.622
1967-68 1.167 158 3 1.328
1968-69 1.416 169 3 1.588
1969-70 1.404 137 3 1.544
1970-71 1.149 138 23 1.310
1971-72 1.393 107 34 1.534
1972-73 1.343 86 114 1.543
1973-74 1.503 81 295 1.879
1974-75 1.453 57 546 2.056
1975-76 1.592 726 170 2.488
Y para finalizar recogemos los testimonios de dos antiguos alumnos de la Universidad Laboral “José Antonio Primo de Rivera” de Sevilla:

1. Javier Narbaiza en su libro El día que volvimos a la Universidad Laboral describe el testimonio siguiente:

De Sevilla también acudió al encuentro José Antonio Gutiérrez Resurrección, hoy responsable de Recursos Humanos de una importante empresa de tecnología y mecanización andaluza. En su día concluyó Maestría Industrial, posteriormente Graduado social y estuvo presente en la despedida de los salesianos de la Universidad….
En estos años casi se ha conseguido que Sevilla no nombre la Universidad Laboral. El caso es que quitaron o se ocultaron hasta las placas conmemorativas… Hoy han hecho, en lo que fue la UNI, el segundo campus universitario de la ciudad, y la gente joven lo conoce como la Pablo Olavide. Salvo los miles de alumnos que allí estudiamos un día y los taxistas mayores, que seguimos refiriéndonos a ella por su nombre antiguo, o sea, “Universidá Laborá”, para las nuevas generaciones es otra cosa, y sin tardar mucho la gente pensará que aquello se hizo más o menos cuando la Expo.
Resurrección evocaba al entrañable padre Sardón, que siempre supo estar en lo bueno y en lo malo de las vidas de los antiguos alumnos, y al padre Lorenzo Pajuelo, que en su día dejó la Orden [….]
Los de Sevilla, Zamora y Orense rememoraban la figura de Don Manuel Lorenzo Pajuelo, que ostentó la máxima jerarquía en los centros, conduciéndose siempre como hombre accesible, dialogante y totalmente volcado hacia los problemas de la educación de la juventud.

2. Del periodista Martín Prieto, en su artículo titulado MI UNIVERSIDAD, que fue publicado en el MAGAZINE del diario EL MUNDO, del domingo 12 de junio de 2005, donde dice:

Las Universidades Laborales fueron una experiencia provechosa del populismo franquista, y en concreto, del falangista José Antonio Girón, Ministro de Trabajo a los 29 años. Se trataba de desclasar a los más pobres facilitando a sus hijos una formación técnica de grado medio: maestrías industriales y peritajes. Aunque había unos pocos alumnos externos de cada localidad, el internado era total, y la beca también. La universidad te vestía hasta de calzoncillos y zapatos, te alimentaban, te proporcionaban los libros y el material de trabajo, te cortaban el pelo y te atendían médicamente. Además se le daba una pequeña asignación mensual a los padres por el lucro cesante de un chico que podía estar trabajando de botones o en el campo. Yo estudié Peritaje Industrial en la Universidad Laboral José Antonio Primo de Rivera, en el Cerro del Águila, a siete kilómetros de Sevilla. La llevaban mano a mano los salesianos y los falangistas, con los que pasé años de monaguillo de misa diaria en latín, adoración nocturna y rosario de la aurora, y el Cara al Sol me lo sé del revés. Era un cuartel católico con adolescentes inflados de bromuro. Alfonso Guerra, que también es Perito Industrial, era el profesor de Dibujo Técnico. El estudio era intensivo (excepto deporte no podías hacer otra cosa) y se hacían prácticas en una gran nave industrial que nos convocaba con una sirena. Era la oportunidad para miles de muchachos que hubieran caído en oficios más humildes. La democracia las amortizó apresuradamente como el que retira una estatua de Franco. Estoy agradecido a aquel sistema, a los salesianos y hasta a los falangistas. Sólo les reprocho la reticencia que tenían a que los hijos de obreros y campesinos estudiaran carreras humanísticas.

CRONOLOGÍA HISTORICO-LEGISLATIVA DE LA ANDADURA DE LAS UNIVERSIDADES LABORALES

El anuncio oficial de la creación de las Universidades Laborales lo realiza el Ministro de Trabajo, José Antonio Girón de Velasco, el día 25 de noviembre de 1950, en un discurso que pronunció en el Ateneo de Sevilla, donde dijo:

Vamos a crear gigantescas Universidades Laborales, castillos de reconquista nueva, donde vosotros, y sobre todo vuestros hijos, se capaciten no sólo para ser buenos obreros, que eso es poco, y eso es todo lo más que quisieran los enemigos. Vamos a crear centros enormes donde se formen además de obreros técnicamente mejores hombres de arriba abajo, capacitados para todas las contiendas de la inteligencia, entrenados para todas las batallas del espíritu, de la política, del arte, del mando y del poder. Vamos a formar trabajadores dentro de unos españoles libres y capaces. Y vamos a hacer la revolución de los hombres y no la revolución de unas máquinas de rendir trabajo. Rendir trabajo es poco, tenemos derecho a rendir Historia.

Unos años más tarde los Ministerios de Educación Nacional y del Trabajo promulgaron la Orden conjunta de ambos Departamentos de 12 de julio de 1956 por la que se aprueba, con carácter provisional, el Estatuto de las Universidades Laborales, norma que en su Introducción dice lo siguiente:

Base 1ª.- Misión
La Universidad Laboral nace como institución superior de cultura del ámbito del trabajo en la triple dimensión humana, técnica y profesional, fundada y sostenida bajo la tutela del Estado, por los trabajadores españoles.

Base 2ª.- Personalidad jurídica.
La Universidad Laboral se constituye en órgano docente a través de las Mutualidades Laborales con personalidad jurídica propia, bajo el régimen de Patronato y con prerrogativas que las leyes vigentes confieren a las entidades de este carácter.

Base 3ª.- Funciones.
La Universidad Laboral cumplirá las siguientes funciones:

A) Formar, educar, adiestrar a la juventud trabajadora en el orden humano, profesional y técnico, a través de los diversos grados docentes.
B) Enriquecer el espíritu y la dignidad social de los trabajadores adultos y atender a su perfeccionamiento técnico y profesional.
C) Elevar el nivel cultural, social y de producción en el área en que la Universidad Laboral radique, mediante cursos y campañas específicas.
D) Facilitar a través de un sistema becario o mediante la creación de instituciones adecuadas, el acceso de los alumnos más capaces o de probada vocación a otros estudios de cualquier jerarquía, bien en establecimientos propios o en aquellos donde se impartan las enseñanzas correspondientes.

Base 10.- Número.
Por el momento se determina la creación de las cuatro Universidades Laborales siguientes:

A) De Gijón.
B) De Córdoba.
C) De Sevilla.
D) De Tarragona,

Aparte de estas Universidades Laborales se previene para el futuro la institución de una destinada especialmente a la formación humana, profesional y técnica de los emigrantes españoles a los países hispanoamericanos.

Base 11.- Enseñanza laboral femenina.
Se reconoce el derecho de las mujeres trabajadoras a una adecuada educación laboral que podrá organizarse ya en una Universidad propia o en Secciones distintas que dependan de las Universidades Laborales existentes siempre a base de la separación de sexos, tanto en los edificios como en las enseñanzas.

La Presidencia de Gobierno promulgó la Orden de 16 de agosto de 1958 por la que se aprueba el Estatuto docente de las Universidades Laborales (BOE 28-08-1958), donde se dice:

Las Universidades Laborales, creadas por el Ministerio de Trabajo y sostenidas por las Mutualidades Laborales, son instituciones docentes dedicadas, en estrecha cooperación con el Ministerio de Educación Nacional, a la formación profesional y técnica –en todas sus modalidades de estudios y grados- y a la formación humana de la juventud española.

Para el mejor y más eficaz desarrollo de su misión, los estudios que pueden realizarse bajo su egida se distribuirán en dos grupos docentes:

a) Enseñanzas regladas.
b) Enseñanzas no regladas.

Enseñanzas regladas son las que se imparten de acuerdo con las normas legales, vigentes, en relación con la docencia respectiva:

I. Formación Profesional Industrial y Agrícola.
II. Bachillerato Laboral, Elemental y Superior.
III. Formación Técnica, de Grado Medio y Superior.
IV. Formación Social.

Para cursar estos estudios existirán en las Universidades Laborales las instituciones siguientes:

I. Escuelas de Aprendizaje y Maestría Industrial, Escuela de Capataces Agrícolas.
II. Institutos Laborales.
III. Escuelas Técnicas de Grado Medio y Superior.
IV. Escuelas Sociales.

Enseñanzas no regladas son las que imparte la Universidad de acuerdo con los planes establecidos por el Consejo Técnico de Universidades Laborales y aprobados por la Jefatura del Servicio de Mutualidades Laborales, y que están orientadas a la formación de profesionales y técnicos según necesidades de la producción. La ordenación de estas enseñanzas es privativa de la Universidad Laboral en tanto no reguladas oficialmente.

Se considerará dentro de este grupo de enseñanzas las correspondientes al perfeccionamiento profesional y capacitación social de trabajadores adultos. El perfeccionamiento profesional tiene como finalidad la de dotar al trabajador de los conocimientos tecnológicos del oficio que ejerce en su profesión habitual y se completan estas enseñanzas con las correspondientes a capacitación social, dedicadas al estudio de las materias referentes a Productividad, Relaciones Humanas, así como las normas fundamentales de la legislación social vigente.

Con el fin de que la Universidad Laboral sea un instrumento docente de acuerdo con las exigencias del tiempo, los planes de estudios procurarán abarcar las enseñanzas que exijan el progreso de la técnica y el de la industria nacional en cuya zona de influjo se sitúe esta institución.

Para mantener viva la Universidad Laboral y conseguir el más alto perfeccionamiento del profesorado que en las mismas sirve se establecerán cursos e intercambios con centros análogos del extranjero, cooperando en la medida de sus posibilidades al progreso de la investigación de aquellos otros que se dediquen a esta tarea específica en nuestra Patria.

Finalmente, la expansión de la Universidad fuera de sus muros, mediante la extensión cultural permitirá que los beneficios de los conocimientos en la cultura y en la técnica puedan llegar a todas las zonas y comarcas que corresponden al distrito geográfico que le esté asignado. De esta forma cooperará a elevar el nivel de vida de los trabajadores y a aumentar el rendimiento de las fuentes naturales de riqueza existentes en esas regiones.

Las Universidades Laborales han abierto en el panorama de la cultura española un nuevo camino a la segura esperanza de un mañana mejor. Una vez más, en nuestra Patria el trabajo adquiere categoría universitaria, lo que equivale a decir que se le dota de una dimensión creadora en función de los valores del espíritu, que son, a la postre, los que destacan a los grandes pueblos en el camino de la Historia.
Ámbito
Artículo primero. Conforme a lo dispuesto en el Decreto de 26 de julio de 1956 (BOE de 19 de agosto de 1956), el presente Estatuto regula el funcionamiento docente de las Universidades Laborales de Córdoba, Gijón, Sevilla y Tarragona y las que en lo sucesivo puedan reconocerse como tales de acuerdo con el artículo 46 de la Ley de 20 de julio de 1955.

Personalidad
Art. 2º. La Universidad Laboral es órgano docente de las Mutualidades Laborales, con personalidad jurídica propia y con las prerrogativas que las leyes vigentes confieren a las entidades de este carácter.

Fines
Art. 3º. La Universidad Laboral cumplirá los siguientes fines:

a) Formar, educar y adiestrar a sus alumnos en el orden humano, profesional y técnico a través de los diversos grados docentes.

b) Atender al perfeccionamiento técnico, profesional y social de los trabajadores adultos, enriqueciendo al mismo tiempo su espíritu y formación humana.

c) Elevar el nivel cultural, social y de la producción en el área en que radique la Universidad Laboral mediante cursos específicos y de extensión cultural.

d) Facilitar, a través de un sistema becario o mediante la creación de instituciones adecuadas, el acceso de los alumnos más capaces o de probada vocación a otros estudios de cualquier jerarquía, bien en Establecimientos Propios o en aquellos donde se impartan las enseñanzas correspondientes.

Órdenes docentes
Art. 8º. Las Universidades Laborales estarán integradas por un conjunto de Instituciones educativas que abarcarán los siguientes órdenes docentes.

1º. Los estudios correspondientes a la Formación Profesional Industrial, en sus distintos grados y en las especialidades que en cada caso se les reconozcan.
2º. El Bachillerato Laboral Elemental y Superior en las modalidades y especialidades que en cada caso se determinen.
3º. Enseñanzas de perfeccionamiento profesional y de Formación y Capacitación Social.
4º. Enseñanzas profesionales elementales y estudios técnicos especiales de los grados medio y superior, respectivamente, encaminados a proporcionar personal cualificado o técnicos especializados.

A continuación la Jefatura del Estado promulgaría la Ley 40/1959, de 11 de mayo, sobre Universidades Laborales, donde se dice:

Art. 1.- Las Universidades Laborales son Instituciones docentes con la misión de capacitar profesional y técnicamente a los trabajadores españoles y elevar su total formación cultural y humana para hacer posible su acceso a cualquier puesto social.

Art. 2.- El Estado ejercerá sobre las Universidades Laborales una obra de protección e impulso a través del Ministerio de Trabajo, que determinará reglamentariamente los órganos de gobierno de las Universidades Laborales y sus facultades de gestión en relación con las superiores de dirección y fiscalización del Ministerio, así como todo lo referente a patrimonio y administración de dichas Instituciones.

Art. 3.- Sin perjuicio de que en el futuro puedan establecerse mediante Ley nuevas Universidades Laborales, se confirman con tal carácter la de “Francisco Franco”, de Tarragona; la de “José Antonio Primo de Rivera”, de Sevilla; la de Onésimo Redondo”, de Córdoba, y la de “José Antonio Girón”, de Gijón.

Para desarrollar dicha ley, el Ministerio de Trabajo promulgó el Decreto 2265/1960, de 24 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento Orgánico de las Universidades Laborales, donde se dice:

Art. 1. Las Universidades Laborales creadas mediante la Ley cuarenta de once de mayo de mil novecientos cincuenta y nueve, son Instituciones docentes con la misión de capacitar profesional y técnicamente a los trabajadores españoles y elevar su total formación cultural y humana para hacer posible su acceso a cualquier puesto social.

Art. 2. Las Universidades Laborales tendrán, la consideración de Instituciones Públicas no estatales y gozarán a efectos académicos, mediante el cumplimiento de los requisitos correspondientes, de la situación y beneficios que por la legislación docente se conceden a los Centros no estatales reconocidos por el Estado. Asimismo disfrutarán de los beneficios atribuidos por las leyes a las Fundaciones benéfico-docentes.

Art. 3. 1. La misión atribuida a las Universidades Laborales tendrá como cometido:

a) Impartir las enseñanzas que se determinan en el artículo cuarenta y seis de la Ley de veinte de julio de mil novecientos cincuenta y cinco y en la ley de dieciséis de julio de mil novecientos cuarenta y nueve y las que puedan implantarse al amparo de la Ley de veinte de julio de mil novecientos cincuenta y siete y sus disposiciones concordantes y de aplicación.
b) Establecer cuantos estudios, incluso de carácter superior, puedan ser desarrollados con eficacia de acuerdo con lo que para cada uno de ellos se disponga en la legislación reguladora del orden docente que corresponda.
c) Organizar cursos de perfeccionamiento y de readaptación profesional en régimen normal de formación acelerada para trabajadores adultos e inválidos recuperables.
d) Amparar, mediante becas la capacitación de alumnos en otros centros de Enseñanza Media y Superior.
e) Desarrollar planes formativos de posgraduados.
f) Desarrollar, previo informe y con la colaboración de la Organización Sindical, cursos de divulgación profesional o social para trabajadores adultos.
g) Proyectar la influencia de la Universidad en su demarcación territorial mediante la adecuada labor de extensión cultural.

2. La relación que antecede podrá ser ampliada mediante Decreto en función de futuras modificaciones en el régimen legal de las distintas modalidades de la enseñanza de las necesidades de técnico y obreros calificados y del desarrollo de las Universidades Laborales y de sus planes y progreso en la acción que tienen atribuida.

Art. 4. Los estudios que sobre cada una de las enseñanzas a que se refiere el artículo anterior hayan de ser cursados en las Universidades Laborales, se distribuirán en dos grupos docentes:

Primero.- Enseñanzas regladas, que se impartirán de acuerdo con la legislación respectivamente aplicable, y son las siguientes:

1.º Formación profesional, industrial y agrícola.
2.º Bachillerato Laboral, elemental y superior.
3.º Formación técnica de grado medio y superior.
4.º Formación humana y social.
5.º Otras que en lo sucesivo puedan implantarse.

Segundo.- Enseñanzas no regladas encomendadas a la formación de profesionales y técnicos especializados, según las necesidades de la producción nacional y regional, así como el perfeccionamiento profesional y capacitación social de los trabajadores adultos. Los títulos previos exigibles, planes de estudio, años de duración, número de cursos y demás condiciones a que hayan de ajustarse dichas enseñanzas serán determinadas por el Consejo Técnico.

Art. 5. 1. Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo primero, tendrán también acceso a las Universidades Laborales los familiares de los Trabajadores españoles encuadrados en las Instituciones de Previsión Social obligatoria que contribuyan a la creación y sostenimiento de dichas Instituciones.
2. Igualmente podrán ingresar otros alumnos en régimen becario, e incluso de libre admisión, previo pago de los derechos que correspondan y dentro de los cupos que anualmente determine el Ministerio de Trabajo, en armonía con lo establecido en los artículos nueve y diez de la Ley cuarenta, de once de mayo de mil novecientos cincuenta y nueve.

Art. 6. La ejecución de los planes docentes, así como la disciplina y formación del alumnado, podrá encomendarse a Instituciones del Estado, del Movimiento, de la Iglesia o a entidades particulares, de acuerdo con las normas que, con sujeción a lo que dispone el presente Reglamento, puedan ser dictadas por los Ministerios de Trabajo y de Educación Nacional en las materias de su respectiva competencia y bajo su superior inspección y vigilancia. A tal fin se establecerán los oportunos convenios con las entidades en cada caso concertadas.

La Presidencia de Gobierno promulgó el Decreto 2061/1972, de 21 de julio, por el que se integran las Universidades Laborales en el régimen académico de la Ley General de Educación, donde se asigna a cada Universidad Laboral la impartición de la formación concreta. En esta norma se dice:

Artículo primero.
Uno. Las Universidades Laborales, a tenor de lo previsto en la disposición transitoria cuarta, número uno, de la Ley General de Educación, se integran en el régimen académico de dicha Ley, de acuerdo con lo establecido en este Decreto y en sus normas de aplicación y desarrollo.

Dos. Se consideran actualmente como Universidades Laborales los Centros que se relacionan en la disposición adicional primera de este Decreto.

Tres. El Ministerio de Trabajo podrá extender la acción promocional de las Universidades Laborales, mediante la creación de nuevos Centros docentes, dependientes de las mismas, cuya calificación académica se efectuará de acuerdo

Artículo segundo.
Para el cumplimiento de su misión los Centros docentes de Universidades Laborales tienen plena capacidad en orden a:

a) Impartir las enseñanzas correspondientes a los niveles de Educación General Básica, Bachillerato Unificado Polivalente, educación Universitaria y Formación Profesional en sus diversos grados.
b) Impartir las enseñanzas correspondientes a la Educación permanente de adultos y a la Educación especial, a través de cursos de iniciación, de perfeccionamiento y readaptación profesional.
c) Amparar, mediante becas convocadas a tal efecto, la capacitación de sus alumnos en otros centros, incluidos los de carácter universitario, en todos sus ciclos, en especial a tenor de lo establecido en el artículo sexto de esta disposición.
d) Proyectar su influencia en la demarcación territorial correspondiente mediante una adecuada labor de extensión y promoción cultural.

Artículo tercero.- Beneficiarios
Uno. A los Centros docentes de Universidades Laborales tienen acceso los trabajadores españoles y sus familiares incluidos en el Sistema de la Seguridad Social, que sean desclasados beneficiarios de una beca o prestación de acción formativa, en las condiciones que reglamentariamente determine el Ministerio de Trabajo.

Dos. También tienen acceso a los Centros docentes de Universidades Laborales otros alumnos especialmente los de la zona, comarca o región en que aquellos se encuentren enclavados, bajo el sistema de conciertos o convenios con Organismos, Instituciones, Empresas o, en su caso, por el pago de los costes establecidos por el Ministerio de Trabajo en cada supuesto, con adecuación al régimen económico establecido con carácter general para cada grado o nivel de enseñanza.

Tres. A los efectos de la legislación de protección escolar y promoción educativa, los alumnos-becarios de los Centros de Universidades Laborales tienen la condición de becarios en los Centros oficiales en los que hayan de satisfacer tasas y demás cargas económicas por razón de matrícula y conceptos asimilados.

Artículo cuarto.- Órganos académicos
Cada Universidad Laboral contará con un Claustro de Profesores y un Consejo Asesor en el que estarán representados los padres de los alumnos a través de las instituciones Mutualistas de la Seguridad Social. El Claustro y el Consejo Asesor son únicos para cada Universidad Laboral, sin perjuicio de que puedan funcionar en secciones diferenciadas, atendiendo a las exigencias de especialización de los distintos niveles y grados educativos. El Director Técnico de dichos niveles y grados contará con la titulación e idoneidad requerida por la legislación académica aplicable.

Artículo quinto.- Niveles, modalidades y grados educativos.
Uno. El sistema de Universidades Laborales impartirá, cuando así se disponga por el Ministerio de Trabajo y previo informe del Ministerio de Educación y Ciencia, las enseñanzas correspondientes a la segunda etapa de la Educación General Básica y las de Formación Profesional de Primer Grado, cuya gratuidad se hará efectiva en los términos que se concierten al amparo de la Ley General de Educación.

Dos. En el nivel de Bachillerato y en el Segundo Grado de Formación Profesional, se reconocerá por el Ministerio de Educación y Ciencia a los Centros docentes de Universidades Laborales, la condición de Centros homologados, a los efectos establecidos en los artículos noventa y cinco y concordantes de la ley general de Educación.

Tres. Los Centros docentes de Universidades Laborales mantienen su competencia de organizar cursos de perfeccionamiento, de actualización y reconversión profesional y, en general, las actividades relativas a la educación permanente de adultos en cuanto constituya materia propia del Ministerio de Trabajo, a tenor del artículo cuarenta y cinco de la Ley General de Educación. A tal efecto, atenderán preferentemente los cursos de perfeccionamiento y reconversión profesional de personal ya especializado, en sus distintos niveles, de acuerdo con los objetivos del Programa de Promoción Profesional del Ministerio de Trabajo.

Cuatro. Los Centros docentes de Universidades Laborales podrán realizar actividades relativas a cursos para inválidos recuperables, dentro de la Educación Especial, en los términos reconocidos en el número anterior.

Cinco. Se autoriza a los Centros docentes de Universidades Laborales para que impartan el Curso de Orientación Universitaria, cuyo régimen, desarrollo y valoración se ajustará a lo dispuesto en la Ley General de Educación.

Seis. Las actuales Escuelas de Ingeniería y Arquitectura Técnica existentes en las Universidades Laborales quedan constituidas por este Decreto en Escuelas Universitarias no Estatales, según los términos recogidos en la disposición adicional segunda, y adscritas al Distrito Universitario correspondiente. También se podrán crear en las Universidades Laborales otras Escuelas, así como Colegios y otros Centros de Educación Universitaria.

DISPOSICIONES ADICIONALES

Primera. Tienen el carácter de Universidades Laborales los centros siguientes: Francisco Franco, de Tarragona; José Antonio Primo de Rivera, de Sevilla; Onésimo Redondo, de Córdoba; José Antonio Girón, de Gijón; Crucero Baleares, de La Coruña; San José, de Zamora; la de Alcalá de Henares (Madrid); la de Zaragoza; la de Huesca; la de Cáceres; la de Eibar (Guipúzcoa) y el Centro de Orientación de Universidades Laborales Jesús Romeo, de Cheste (Valencia).

Segunda. Las Universidades Laborales y sus Centros docentes dependientes quedan reconocidos académicamente, con el carácter de centros no estatales, para impartir los niveles y grados educativos que se citan para cada uno de ellos, con adecuación al proceso de desarrollo del sistema educativo instaurado por dicha Ley de Educación.

[…..]

Universidad Laboral de Sevilla

Formación Profesional de Primer Grado.
Bachillerato Técnico Superior (en su día, Bachillerato Unificado Polivalente).
Formación Profesional de Segundo Grado.
Curso de Orientación Universitaria.
Estudios Universitarios de Arquitectura Técnica.
Estudios Universitarios de Ingeniería Técnica Agrícola.

[….]

Y por último la Presidencia del Gobierno promulgaría el Real Decreto-Ley 36/1978, de 16 de noviembre, sobre Gestión Institucional de la Seguridad Social, la Salud y el Empleo, que hizo desaparecer a las Universidades Laborales del Ministerio de Trabajo al ser transferidas a la Administración del Estado a través del Instituto Nacional de Enseñanzas Integradas, perteneciente al Ministerio de Educación y Ciencia, por lo cual pasaron a llamarse Centros de Enseñanzas Integradas para, más tarde, transformarse en IES o Campus Universitarios como la UL-Sevilla, actualmente Universidad Pablo Olavide. Así:
Art. 4. Transferencias de la Seguridad Social a la Administración del Estado.
Quedan transferidos a la administración institucional del Estado y dejan de tener la condición de organismos de la seguridad social: el servicio de empleo y acción formativa, promoción profesional obrera, servicio de universidades laborales, así como el servicio social de seguridad e higiene en el trabajo, sin perjuicio de lo dispuesto, con respecto a este último, en el párrafo cuarto del artículo 5 del presente Real Decreto-Ley.

Art. 5. Funciones y organismos del Estado.
3. Se crea el Instituto Nacional de Enseñanzas Integradas, organismo autónomo de carácter administrativo, adscrito al Ministerio de Educación y Ciencia, que estará dotado de personalidad jurídica propia y asumirá las funciones y competencias, actualmente atribuidas al servicio de universidades laborales, el cual quedará suprimido, extinguiéndose, asimismo, la personalidad jurídica de aquellas universidades laborales que la tengan actualmente reconocida.

DISPOSICIÓN FINAL PRIMERA. Organismos extinguidos.

Quedan extinguidos los siguientes organismos:

1. El instituto nacional de previsión.
2. El servicio del mutualismo laboral, mutualidades laborales y demás entidades gestoras de estructura mutualista.

4. Los servicios sociales de:

1. Empleo y acción formativa, promoción profesional obrera.
2. Universidades laborales.
3. Higiene y seguridad en el trabajo.

DISPOSICIÓN FINAL SEGUNDA. Normas derogadas.

 Ley de 11 de marzo de 1959, que establece normas reguladoras de las Universidades Laborales.


BIBLIOGRAFÍA DE LAS UNIVERSIDADES LABORALES

LIBROS:

Cano Lasso, Julio // Universidad Laboral de Ourense // Centro de Publicaciones del Ministerio de Fomento, Madrid, 2004.

Casabella López, X. // A Universidade Laboral da Coruña no contexto da Universidades Laborales de España // Obradoiro, 1990.

Centelles Bolós, Felipe // Los cien mil hijos de Girón. Un impacto social de las Universidades Laborales // Editorial Azacanes, Toledo, 2002.

Codina Bas, Juan, y, Panalba Guillén, Francisco // De Centro de Orientación de Universidades Laborales a Complejo Educativo (1969-1994) // Complejo Educativo de Cheste, Comisión Coordinadora del XXV Aniversario.

Delgado Granados, Patricia // La Universidad de los pobres. Historia de la Universidad Laboral sevillana y su legado a la ciudad // Secretariado de Publicaciones de la Universidad de Sevilla, 2005.

Escribano, Fernando // La Universidad de los obreros, en el libro “El Franquismo año a año. Lo que contaba y ocultaba la dictadura. nº 15, 1955” // Biblioteca EL MUNDO, Madrid, 2006.

Flor Vallbona, Ángel de la, y, Buendía del Valle, Emilio // Educación e internado (Universidad Laboral) // Imp. T.P.A., Madrid, 1966.

Fundación Metal Asturias // Las Universidades Laborales como Instituciones de Formación // Gijón, 2005.

Girón de Velasco, José Antonio // Discurso de José Antonio Girón de Velasco dado en Sevilla, el día 25 de noviembre de 1950 // Ministerio de Trabajo, Madrid, 1950.

Girón de Velasco, José Antonio // La Cultura: instrumento necesario para la revolución social // Revista VIVIENDA Y PARO, Diciembre-1950, Ediciones de la Comisaría Nacional del Paro. Ministerio de Trabajo, Madrid, pags.17-23.

Girón de Velasco, José Antonio // La libertad del hombre meta de la revolución social española (Conferencia pronunciada por José Antonio Girón de Velasco en el Teatro San Fernando de Sevilla, el día 3 de noviembre de 1951) // Altamira, Madrid, 1951.

Girón de Velasco, José Antonio // Discurso en la inauguración de las Universidades Laborales de Sevilla, Córdoba y Tarragona, el día 8 de noviembre de 1956 // Ministerio de Trabajo, Madrid, 1956.

Girón de Velasco, José Antonio // Reflexiones sobre España // Planeta, Barcelona, 1975.

Girón de Velasco, José Antonio // Si la memoria no me falla // Planeta, Barcelona, 1994.

Jordá Duch, Carmen // Universidad Laboral de Cheste 1967-1969 // Gustavo Gili, Barcelona, 2002.

López de Torrijos, Flor María // Las Universidades Laborales en España (su aporte al desarrollo económico-social) // Enbajada de Panamá (España), Madrid, 1976, 40 págs.

Narbaiza, Javier // El día que volvimos a la Universidad Laboral // Libros de la Memoria, Madrid, 1999.

Ríos González, Sergio, y, García de Castro Valdés, Cesar // La Universidad Laboral de Gijón // Trea, Gijón, 1997.

Ruiz Berrio, Julio // La educación en la España contemporánea. Cuestiones históricas // Sociedad Española de Pedagogía, Madrid, 1985, pags. 272-278: Las Universidades Laborales // Gómez Rodríguez de Castro, Federico.

Ruiz Berrio, Julio y otros // La educación en España a examen (1898-1998), tomo II, Ministerio de Educación y Cultura e Institución Fernando el Católico (CSIC), Diputación de Zaragoza, 1998, pag. 177: Universidades Laborales: un modelo de educación falangista en el franquismo // Zafrilla Torralba, Ricardo.

Zafrilla Tabarra, Ricardo // Universidades Laborales: un proyecto educativo falangista para el mundo obrero (1955-1978). Aproximación histórica // Ediciones Universidad de Castilla-La Mancha, Cuenca, 1998.

Zafrilla Tabarra, Ricardo, y Uriel Heras, Julia // Universidades Laborales: Aproximación a su historia económica // Popular Libros, Albacete, 2006.

FOLLETOS E INFORMES DEL MINISTERIO DE TRABAJO:

Borrajo Dacruz, Efrén (Director General de Promoción Social) // Universidades Laborales: Balance y perspectiva 1969-1975 / // Ministerio de Trabajo. Servicio de Publicaciones, Madrid, 1974, 86-págs.

Ministerio de Trabajo. Consejo Técnico de las Universidades Laborales // Plan inicial de las Universidades Laborales para el curso 1956-1957 // Gesper, Valladolid, 1956, 47-págs.

Ministerio de Trabajo. Servicio de Publicaciones // Universidades Laborales // Madrid, 1972, 20-págs.

Ministerio de Trabajo. Servicio de Montepíos y Mutualidades Laborales // Escuelas de Capacitación Social de las Universidades Laborales // Gráficas Nilo, Madrid, 1960, 24-págs.

Utrera Molina, José // Nuevo Horizonte de las Universidades Laborales // Servicio de Publicaciones del Ministerio de Trabajo, Madrid, 1970, 22-págs.

REVISTAS Y PERIÓDICOS:

Informe sobre la Universidades Laborales // CUADERNOS PARA EL DIALOGO, nº 16, Octubre-1969. Nº Extraordinario: Aspectos de la Educación en España.

Prieto, Martín // Mi Universidad // MAGAZINE, diario EL MUNDO, Domingo, 12-Junio-2005.

Primo Jurado, Juan // La Universidad Laboral // Periódico ABC, Domingo, 15-Diciembre-2002.

Revista de la Conmemoración del 25 Aniversario de la Universidad Laboral-C.E.I de Huesca, 1967-1992.

Revista juvenil FORJA de la Universidad Laboral de Huesca, 1969-1972.

Revista juvenil HORIZONTES de la Universidad Laboral de Sevilla, 1956-1965.

Revista juvenil LA TORRE de la Universidad Laboral de Gijón, 1956-1962.

Revista juvenil SPIRA de la Universidad Laboral de Córdoba, 1957-1959.

Revista juvenil EL CUCO del Colegio San Álvaro de la Universidad Laboral de Córdoba, 1976.

Revista juvenil VELETA de la Universidad Laboral de Zaragoza, 1968.

Revista UNI, de la Hermandad de Antiguos Alumnos de Universidades Laborales, Ministerio de Trabajo, Madrid 1968-1976:

 nº 36, Diciembre-1976: 20 Aniversario de la creación de las Universidades Laborales.
 nº 46, Diciembre-1978, pags. 19-31: Lorenzo Pajuelo, Manuel de // Las Universidades Laborales ante una difícil encrucijada.

Treviño Garrido, Eduardo // Los obreros que Franco quiso aburguesar // Revista INTERVIÚ, nº 147, Marzo-1979, pag. 28-31.


PÁGINAS WEB EN INTERNET SOBRE UNIVERSIDADES LABORALES:

www.universidadeslaborales.com (página creada por Rafael Zafrilla Torralba).
www. geocities.com/unilaboralsevilla (página creada por Vicente Angulo del Rey).

No hay comentarios: